Analizar los procesos y sistemas de trabajo de tu empresa te ayudarán a medirla rentabilidad de la misma. ¿Te gustaría que tu empresa tuviera una eficacia en su productividad?
Te compartimos 5 técnicas eficaces
Técnica de Pareto
También conocida como la regla 80/20, esta técnica basa su teoría en que el 80% de los resultados de un trabajo realizado requieren del 20% del esfuerzo y tiempo de una persona, y el 20% restante depende del 80% de trabajo.
La idea principal de esta técnica es identificar cuáles son las tareas que aportan mayores beneficios a la empresa y enfocar el 20% de esfuerzo y tiempo a dichas actividades, dejando en tareas secundarias las que menos beneficios generan y mayor tiempo consumen.
Técnica Pomodoro
Para implementar esta técnica necesitarás tener un temporizador a la mano. Este método, implementado por Francesco Cirillo, un ingeniero informático, consiste en trabajar durante periodos de 25 minutos sin interrupciones, después tomar un descanso de 5 minutos, y cada 4 periodos de trabajo, tomar un receso de 10 o 15 minutos. El objetivo es que las personas se concentren en la actividad que están realizando, sean más productivas y revisen el tiempo para medir sus resultados.
Técnica Seinfield
Este método utilizado para la productividad en las empresas consiste en el uso del calendario para actividades que requieren de mayor tiempo. El objetivo se basa en dividir el trabajo de gran tamaño en tareas más pequeñas por día. Una vez cumplida la tarea del día se tacha y se continúa con el proyecto, en dado caso de no cumplir el trabajo del día, se deja en blanco para observar la falta del cumplimiento de actividades. Cabe mencionar que para realizar esta técnica ya se cuentan con sistemas y herramientas tecnológicas que facilitan el control y seguimiento de actividades.
Técnica Ivy Lee
La creación de esta técnica fue debido al asesoramiento que Ivy Lee proporcionó a Charles Schwab para mejorar la eficacia de su equipo de trabajo. El método es simple, se trata de que los trabajadores de la empresa determinen, al final del día laboral, las 6 actividades esenciales a realizar al día siguiente. Las tareas deben de estar por orden de importancia y el criterio para determinar dicho orden es basado en las tareas que aportan mayores beneficios a la empresa.
Técnica Comunicación Interna
Si en tu empresa hay reuniones interminables, procesos de toma de decisiones largos, dificultad para trabajar en equipo, falta de objetivos, planificación y liderazgo, puede deberse a una mala comunicación.
La comunicación interna, más que ser un método, es un estilo de trabajo que las empresas deberían de implementar para mejorar y automatizar los procesos de comunicación. De esta manera, teniendo la información adecuada de manera oportuna evitará pérdida de tiempo y mejorará la productividad de los trabajadores.
Te recomendamos que analices cada una de estas técnicas para saber
cuál es la más adecuada para tu empresa.
Recuerda, si no se puede medir, no se puede mejorar.